Hace días les comentaba los avisos curiosos que la gente publica y me he encontrado con estas joyas divertidas.

“Cuidado hija bonita, padre altamente entrenado”, complementada con una foto de un arma de largo alcance; “Bajar la perilla hacia arriba”; ahora que tal “Después de un tren, puede venir otro.” Y este: “Se Abla Es Panol y debajo We Speak Spanish here.” Puede que lo hablen, pero escribirlo, pocón, pocón. Hay otra que me trae recuerdos: “Al entrar al templo deje su goma de mascar, cuando salga pase por ella”. Digo recuerdos, porque hace algunos años el padre Bernardo Echeverry (q.e.p.d.) colocó una piedra en el exterior de la iglesia en Roldanillo (Valle), invitando a los feligreses a dejar sus chicles en ella, lo cual arrojó resultados bastante positivos, pues realmente los feligreses respondieron bien a la petición.

“Conduzca con cuidado, no nos sobra ningún habitante.” Buena advertencia, si es que los conductores prestan atención. “Cerrado por viaje, entre paréntesis dice: (no es de placer, voy con mi mujer) Abriré el 26/10, disculpen las molestias, gracias”. Y cuantas veces ocurre esto: “La persona que dejó a la señora de la limpieza encerrada en el baño y se llevó las llaves se pide por favor que las devuelva. Gracias. Fdo. La administración”.

“Timbre malo” y han dibujado unos ojitos rabiosos sobre él. También no falta un aviso de venta del marido, incluye todos los accesorios, desde el sofá hasta el control remoto de la televisión, eso sí advierte que la interesada debe estar segura porque no se acepta devolución.

Y que tal esta advertencia de “Por favor no pasar, si no sabe leer pregunte en boletería, gracias”. Y cómo ven este: “Se habla español en varios idiomas.” Y: “Prohibido acampar y hacer fuego en el fondo del lago.”