Los jóvenes de ahora tienen otra cultura, quizás para personas como yo, nos cuesta entenderlos. Sobre todo, en lo que tiene que ver con su cuerpo.

En esta semana fui a hacer una compra en uno de los grandes almacenes de la ciudad y los tres empleados que me atendieron, no sólo tenían tatuajes en su cuerpo, sino piercings, en los labios, orejas, etc. No es una novedad para mi, ya que hace años una persona de mi familia se colocó un aro en el ombligo, y se le infectó, tuvo que seguir tratamiento para curarse quedándole una cicatriz no muy bonita. Otra conocida fue más allá y lo colocó en la lengua y al parecer se le enredó con un alimento y casi termina ahogada, fuera de que cuando hablaba tenía una dificultad y poco se le entendía. La mayoría que he visto últimamente, se ponen un aro en la nariz, fuera de la colección en las orejas.

Lo máximo que usé y todavía uso son sortijas en dedo pulgar e índice, nada que lastime mi cuerpo. Las marcas que presenta mi rostro y mis manos son efectos de los años. Y si tengo agujeros en las orejas fue porque antiguamente perforaban los lóbulos de las orejas de los bebés (femeninos) al mes de nacidas, colocándole una lanita que posteriormente era reemplazada con unos diminutos aretes.

Pero esto no es nuevo, basta con mirar los luchadores, así como los que practican el boxeo, no son adolescentes, así como los cantantes de rock y otros temas.

Claro que no deja de ser divertido ver gente anciana cuyos tatuajes han cambiado totalmente con el paso del tiempo. Incluso en alguna parte vi un meme donde mostraban la misma persona, joven con su hermoso tatuaje y ya viejo con un dibujo que distaba mucho de ser una obra de arte.

Tengo entendido que en Japón no son bien vistos, ya que han estado relacionado con la mafia japonesa Yakuza o con personas situadas fuera de la ley. Así que exhibirlos públicamente está prohibido en algunos lugares.

Esto aparte de la moda de “mejorar”, si entre comillas, su cuerpo, las lipo tan de moda, el aumento de cualidades etc. Recuerdo que algunas modelos se hacían retirar la última costilla o costilla flotante, para mejorar su estilo. ¿Cuántas mujeres han fallecido en el quirófano? Y otras después de una cirugía que les han practicado, conocida como liposucción. Vi videos cuando ejercí como funcionaria, en investigaciones por homicidio contra médicos de cirugía estética que me dejaron estupefacta.

Y artistas que deformaron tanto su rostro con los cambios que, desafortunadamente son daños irreversibles, terminando con un desagradable físico.

Ni modo de preguntar qué más sigue, porque ya estamos viendo los cambios de sexo, incluso antes de que el infante pueda decidir, ya la niña es niño o viceversa.

Cuantos cambios, ¿y a esto llamamos evolución?