¿Saben qué es increíble? Parece que fue ayer cuando estábamos hablando de Halloween, ¡y ahora volvemos a lo mismo! Les conté que conocí esta celebración gracias a mis amigos gringos.

Después de vivir fuera del país durante algunos años, vi cómo poco a poco Colombia se llenaba de fiestas, como los días llamados de Emiliani, que decían que eran para reducir las celebraciones religiosas, pero al final terminaban siendo un puente de tres días para disfrutar. También tenemos el día de la raza en este mes, que solía ser el 12 de octubre, pero lo cambiaron para el 16, así no cortan la semana y crean un fin de semana largo para todos. ¡Qué plan tan bueno!

Halloween tiene una interesante historia. En realidad, se originó hace miles de años en la antigua cultura celta, que celebraba el festival de Samhain. Esta festividad marcaba el final del verano y el comienzo del año nuevo celta. Los celtas creían que en la noche de Samhain, el velo entre el mundo de los vivos y el mundo de los muertos se volvía muy delgado, permitiendo que los espíritus y las almas de los difuntos regresaran a la Tierra.

Durante esta festividad, se encendían hogueras y se llevaban a cabo rituales para alejar a los espíritus malignos. Además, los celtas se disfrazaban con pieles y cabezas de animales para ahuyentar a los malos espíritus. También dejaban comida y bebida fuera de sus casas como ofrenda para los espíritus benevolentes.

Con la llegada del cristianismo, la Iglesia Católica adoptó algunas tradiciones de Samhain y las incorporó en el Día de Todos los Santos (1 de noviembre) y el Día de los Fieles Difuntos (2 de noviembre). Sin embargo, muchas costumbres paganas prevalecieron y se mezclaron con las nuevas creencias.

Con el tiempo, Halloween evolucionó y se popularizó en Estados Unidos gracias a la influencia de las comunidades irlandesas y escocesas. Fue en el siglo XX cuando se convirtió en la fiesta llena de disfraces, calabazas talladas y dulces que conocemos hoy en día.

En resumen, Halloween es una festividad que combina las tradiciones celtas y cristianas, con un toque único y divertido. ¡Es una oportunidad perfecta para disfrazarse, divertirse y disfrutar de golosinas! De un lado los adultos en fiestas con amigos y del otro para que los pequeños tengan un día de esparcimiento diferente.